En la madrugada del 3 de octubre de 2015, un avión de combate estadounidense bombardeó repetidamente nuestro hospital en Kunduz, en el norte de Afganistán.
Los ataques mataron a 22 personas, incluyendo pacientes y personal de Médicos Sin Fronteras, e hirieron a cerca de 40 más. El hospital mismo quedó destruido, privando a cientos de miles de personas de la oportunidad de recibir atención traumatológica de emergencia.
En nombre de nuestros colegas y pacientes muertos y heridos -y de todo nuestro personal y pacientes en todo el mundo- hemos solicitado la apertura de una investigación internacional independiente sobre el bombardeo de nuestro hospital en Kunduz, a cargo de la Comisión Internacional Humanitaria de Encuesta (CIHE o IHFFC por sus siglas en inglés) .
Ahora, esta comisión se ha activado. Pero falta un paso indispensable: se requiere el consentimiento de los países implicados para la puesta en marcha de una investigación completa, transparente e imparcial.
La investigación independiente sobre el ataque en Kunduz es esencial para reafirmar el derecho de organizaciones como la nuestra para proporcionar atención médica independiente e imparcial en zonas en conflicto.
Por que incluso la guerra tiene reglas.
#IndependentInvestigation
Gerald Massis
Director
Médicos Sin Fronteras México